La reutilización de los envases en general y de las bolsas de la compra en particular, es una faceta clave para hacer los recursos más sostenibles ampliando la vida útil de los productos.

Usar y tirar no tiene ningún sentido cuando se puede reutilizar varias veces una bolsa. La experiencia nos muestra que los consumidores reutilizan las bolsas de papel para diferentes usos, por ejemplo, para llevar sus cosas, el almuerzo o la comida al trabajo, para volver a comprar o para depositar otros papeles o cartones en el contenedor azul, etc.

Pero faltaba un método científico que avalase la propiedad de reutilización de las bolsas de papel. Para ello, se propuso a Itene, Instituto Tecnológico del Embalaje, Transporte y Logística, obtener un método de evaluación de la capacidad de reutilización de las bolsas de papel en general.

El concepto de reutilización de un envase está definido por la Ley 11/1997 de 24 de abril, de Envases y Residuos de Envases. Reutilización (Directiva 94/62/CE), que dice: “toda operación en la que el envase concebido y diseñado para realizar un número mínimo de circuitos, rotaciones o usos a lo largo de su ciclo de vida, sea rellenado o reutilizado con el mismo fin para el que fue diseñado, con o sin ayuda de productos auxiliares presentes en el mercado que permitan el rellenado del envase mismo. Estos envases se considerarán residuos cuando ya no se reutilicen”.

Según la definición anterior, la verdadera clave de que una bolsa sea considerada reutilizable es precisamente que vuelva a ser utilizada para volver a comprar el mismo tipo de compra con la que se utilizó una primera vez. Es decir, si se trata de una bolsa de supermercado su verdadera medida de reutilización sería que volviésemos a comprar varias veces con ella a un supermercado.

Para este estudio, Itene consideró un mínimo de 4 reutilizaciones, como un parámetro alcanzable y extrapolable para todas las bolsas de papel en general, independientemente del diseño, calidad del papel, dimensión, etc.

Es muy probable que haya bolsas de papel que aguanten un mayor número de usos. No obstante, con un mínimo de 4 usos, ya se consideraría a la bolsa de papel como reutilizable o bolsa con más de un uso.

El método de evaluación de Itene contempla una secuencia de ensayos que simulan los riesgos a los que se enfrenta una bolsa de papel en su etapa de uso.

El ensayo de fatiga simula las vibraciones que sufre una bolsa al ser transportada por una persona caminando a paso normal desde el comercio a su destino y el ensayo de manipulación que simula los diferentes tirones a las que se encuentra expuesta una bolsa cuando se coge para elevarla.

El estudio evaluó, dos usos distintos, la bolsa para uso en el comercio textil y la bolsa para “otros usos” que se puede utilizar en el resto de los sectores comerciales. No es lo mismo llenar una misma bolsa con una prenda textil que con la compra realizada en un supermercado. Ni el peso a soportar, ni el tiempo de transporte son los mismos.

Para los ensayos de uso textil se trabajó con capacidad de carga de 4 kg., un tiempo de transporte de 30 minutos y cinco tirones.

Para los ensayos “otros usos” se trabajó con una carga de 6 kg., un tiempo de transporte de 7 minutos y cinco tirones.

Los resultados de la validación ponen de manifiesto que la bolsa de papel independientemente del tipo de asa, es reutilizable, tanto para un uso textil como para otros usos puesto que ha soportado todas las secuencias de ensayos con 20 repeticiones.

Reutilicemos las bolsas de papel van con los nuevos tiempo.